JUEGO
DEL DÍA

Requerirás velocidad y artillería para ganar en Black Paradox.

Black Paradox

Tirador rápido de rogue-lite

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Con colores de neón, pixeles retro y una banda sonora de sintetizadores, Black Paradox es un juego de apunta y dispara de desplazamiento lateral con aspecto ochentero por los cuatro costados.

Eres un cazarrecompensas que vuela por el espacio a bordo de un DeLorean a propulsión. Tu tarea es derrotar a los cabecillas de una pandilla llamada (y con razón) los Hellraiser.

En Black Paradox, el espacio es un lugar peligroso.

Para alcanzarlos, tendrás que disparar abriéndote camino entre oleadas de naves enemigas generadas aleatoriamente, de tal manera que cada partida siempre es una nueva cacería. Tus potentes armas también son generadas al azar y abarcan desde cañones de riel, láseres y misiles a opciones más originales como la ultra divertida Moroder (presumiblemente llamada así en honor a Giorgio Moroder, la leyenda de la música disco) que dispara una ola de devastadoras notas musicales.

El arma secreta definitiva es la Black Paradox, una siniestra réplica de tu nave que multiplica por dos el daño de tus ataques, algo especialmente útil para vencer a los jefes que se mueven siguiendo un patrón y que compensan lo predecible de sus movimientos con fuerza bruta.

Tu DeLorean interestelar está equipado para lidiar con la mayoría de tus enemigos, pero no creas que te lo vas a poder tomar con calma.

Controlar tu nave es tan fácil como deslizar el dedo por un lado de la pantalla mientras tocas en el otro para disparar. Mantener ese dedo presionando para disparar constantemente suele ser la mejor táctica. Los oscuros límites del espacio están llenos de enemigos pero, por suerte, cambiar de arma es tan fácil como deslizar rápidamente tu dedo por la pantalla.

Eso es algo que tendrás que hacer a menudo. Black Paradox no es fácil. Esquivar rayos es tan importante como disparar, el ritmo de los niveles suele ser vertiginoso y los enemigos salen de todas partes.

Sí, eso se ve difícil de esquivar.

Lo bueno es que con cada nueva partida el juego va siendo más fácil. Y es que cada vez que juegas, obtienes créditos con los que puedes actualizar tu nave permanentemente, lo que hace que cada nueva ronda te otorgue algo de ventaja sobre la anterior. En el espacio, la muerte es un contratiempo pasajero.

Y aunque sufrirás mucho de esos, en Black Paradox siempre valen la pena. Deslumbrante, elegante y exigente, el juego es un impresionante bombazo y toda una declaración de amor a la década de los 80.