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La última frontera
Star Trek Fleet Command
¿Acabas de empezar a explorar el inmenso universo de Star Trek Fleet Command? Nuestros expertos consejos colocarán un as bajo tu manga mientras luchas por abrirte camino a través del cuadrante Alfa.
Preparándote para ir en serio
Al principio, tus naves sólo tienen energía para alcanzar sistemas de nivel inferior. Pero tu rango de propulsión warp aumentará si mejoras tus naves y construyes otras tan potentes como la medusa del capitán Spock. Esto también te permitirá acceder a las lucrativas misiones ofrecidas por nausicaanos, andorianos, gorn y demás facciones.
Recuerda que la ubicación de tu base no afecta a tu rango. El número de sistemas que haya entre tu destino y tú no importa. Para entrar en un sistema, tu nave sólo necesita unos impulsores warp que alcancen cierta potencia.
Establece tu base
Tu base espacial no está fija y puede desplazarse a través de sistemas distantes. Cámbiala de lugar para así reducir el tiempo de viaje cuando estés cazando o recopilando recursos.
Para ello, empieza recuperando y atracando todas tus naves y toca otro sistema. Si contiene planetas que soportan bases estelares (reconocibles por un ícono especial) y si poseen suficiente espacio libre, reubica la base tocando el comando correspondiente y asiéntate en un nuevo hogar. Ten en cuenta que para realizar el salto necesitarás una ficha de reubicación que podrás adquirir en tus misiones o en los cofres gratuitos que aparecen de vez en cuando.
Unos cristales muy preciados
Al empezar, desbloquearás una serie de misiones de entrenamiento en las que lucharás contra enemigos cada vez más fuertes. Triunfar en estas batallas te otorgará grandes recompensas como el Dilithium, un recurso muy difícil de conseguir con el que podrás acelerar la construcción de tu primera base espacial.
Pon esa refinería en marcha
Cuando tu nivel de jugador se acerque a la adolescencia, desbloquearás la refinería, un lugar donde procesarás el cristal, gas y mineral que has ido extrayendo en bruto. Asegúrate de construir este edificio en cuanto los estudios den sus frutos.
Los materiales refinados empiezan teniendo dos niveles: común y poco común. Pero cuando alcanzas un nivel entre el 18 y el 20, los materiales poco comunes irán apareciendo con mayor frecuencia proporcionándote algunas de las mejoras más útiles de toda la galaxia. Los materiales menos comunes hacen que tus naves sean extremadamente potentes y muchas de las mejoras de construcción dependen directamente de ellos.
Mantén tu refinería en funcionamiento durante el máximo tiempo posible. Y recuerda, si acumulas suficiente materia prima (agarra esos nodos de minería), podrás hasta hacer lotes dobles o triples en los niveles superiores.
Elige un bando
Alrededor del nivel 20, podrás acceder a los sistemas que hay dentro del espacio de la Federación, los romulanos y los klingon. Únete a una de estas facciones cuando te lo pida el escenario o sumérgete directamente en el combate y aniquila las naves de uno de los bandos para hacerte de una buena reputación frente a las otros dos.
En cuanto consigas 500 puntos junto a una facción, empezarás a recibir objetivos diarios para extraer recursos o destruir enemigos. Completarlos dará un gran impulso a tu reputación y de paso pondrá unos cuantos créditos de facción en tu bolsillo. Con el tiempo, puede que las naves más poderosas y únicas sean puestas a tu cargo. Esfuérzate y sé constante: ¡la Ave de Presa Klingon clase B'Rel y hasta el mismísimo Enterprise podrían estar en tus manos!